lunes, 19 de enero de 2009

Bloody Mary (tequila, flujo y sangre)

Sobre tu cuerpo
Te persigo
Te busco desesperado
Y tú te escondes

En la nada te escucho gemir
Volteo para encontrarte
Pero te esfumas

-Me prestas tu cuerpo 5 minutos?
-… solo uno… nada más…

Me quedo sólo con tu cuerpo
un pedazo de carne, sangre, flujo y nervios
un mero medio, un puente falso,
una barrera de cristal opaco
... y sólo por un minuto



Bloody Mary (tequila, flujo y sangre)

Atención: cualquier parecido con la realidad es puramente accidental...

Se levantó a cerrar la cortina de su cuarto (las que tapaban su puerta, que era transparente). Yo no entendía muy bien…después de 10 shots de tequila es difícil entender el mundo, es como si hubiese una cortina separándote de él, todo es como oscuro, borroso, así como la televisión cuando la señal no llega bien, verdad?

-Qué significará eso?- pensaba mientras ella regresaba a la cama, sin verme.

Acostarme con ella sólo era importante como muestra de una ofrenda, una invitación a su intimidad. Aunque quizás para ella no significaría nada, para mí sí.
No recuerdo muy bien lo que pasó después, así que lo contaré como me viene a la cabeza:

Recuerdo tocarla como desesperado. Quería escarbar en su cuerpo para encontrarla, encontrar un no sé qué, no sé si su amor, un contacto, algo. Le dije “Tienes miedo de hacerme daño?” y me reí ridículamente (forzado) para no parecer vulnerable… seguramente se dio cuenta…y a pesar de…me importa todavía.
Recuerdo su sostén negro y el reflejo de la luna sobre su cuerpo casi plateado, como una coraza de acero que me separaba de ella. Gemía suavemente a veces, moviendo la cara de lado a lado.
-Me prestas tu cuerpo por 5 minutos?- le pregunté, intentando buscarla con un orgasmo, viendo si de esa manera su coraza se rompería.
Me dijo “sólo 1” muy pícaramente… “no, no me quites nada, déjala puesta”
Sumergí mi cara, buscándola con la lengua mientras ella se retorcía suavemente, tratando de liberarse… mi mente completamente vacía, saliendo de mí por la boca, convirtiéndome en su sabor… lost in oblivion
Me detuve y me acosté a su lado, pero nada, creo que ni nos miramos…mas bien la coraza se fortaleció con su satisfacción sexual (como siempre me pasa a mí, cuando él se esconde luego de conseguir lo que quiere).
Me acosté y le di la espalda. No se cuánto tiempo pasó, no recuerdo siquiera si me dormí por un tiempo y luego me desperté (digamos que el tequila y el cansancio dobla el tiempo).
Me di la vuelta para encontrar su cuerpo plateado, como desafiándome, burlándose de mí y mi derrota. Me subí encima de ella y me miró semi-despierta.
Le mordí el pecho, justo al lado del sostén, cada vez más duro. El dolor la había hecho reaccionar a medias, pero creo que la borrachera le había quitado las fuerzas y la pude inmovilizar sin problemas.
Me vi por un tiempo… la luna reflejándose también sobre mi pecho.
La volví a morder y mi colmillo derecho la penetró... el sabor de su sangre apoderándose de mí. Seguí mordiéndola desesperado, la barriga, las piernas (la cara no, nunca pudiese) y vi como las sábanas se tornaban rojas.
Sólo recuerde haberle dicho que era la única manera, y que quisiese estar en su lugar. Creo que gemía, como si entendiese lo que buscaba (lo digo porque poco después dejé de sentir que pusiese resistencia, incluso mientras la despedazaba con mis dientes).
Luego sólo recuerdo estar recostado besando sus labios intactos, una gota de sangre que cayó desde mi colmillo hasta cara, deslizándose hasta la sábana (nunca olvidaré esta imagen).
Sus ojos estaban semiabiertos, ya sin esa chispa que le brillaba tan impactantemente.
Me quedé dormido a su lado, oyendo las gotas de sangre que chorreaban desde la punta de la sábana que colgaba fuera de la cama.

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